17 de noviembre de 2012

BLANCANIEVES


Érase una vez en pleno invierno, cuando los copos de nieve caían del cielo como plu­mas, que una reina estaba sentada cosiendo junto a una ventana con un marco de éba­no. Y como estando así cosiendo levantara la vista hacia la nieve, se pinchó con la aguja en el dedo y tres gotas de sangre cayeron en ella. Y como el rojo se veía tan bello sobre la blanca nieve pensó: «Si tuviese una niña tan blanca como la nieve, tan roja como la san­gre y tan negra como la madera de este mar­co…

Estamos seguros que todos sabríais continuar este cuento y ponerle un título o un nombre a la protagonista de esta conocida historia. Es esta una historia que forma parte de los  cuentos de la infancia muchas generaciones. Una historia que sin dudarlo podríamos contar sin apenas abrir el libro.




Como habréis adivinado se trata de Blancanieves, que cumple este año ni más ni menos que doscientos años. Un libro versionado e ilustrado en infinidad de ocasiones pero que en esta ocasión ha sido rescatado, y no del olvido, por la editorial Nórdica Libros, que quiere sumarse al bicentenario de esta publicación. 



Esta joya de la literatura infantil fue publicada en 1812 por Jacob y Wilhelm Grimm. Los hermanos Grimm, recopilaron  y  elaboraron desde 1803 cuentos procedentes de la tradición oral alemana que publicaron bajo el título “cuentos de hadas para la infancia y el hogar”, conocida popularmente como “Cuentos de hadas de los hermanos Grimm”, ente los que destacaban los famosos: La Cenicienta, Hänsel y Gretel, La bella durmiente, Juan sin miedo o Pulgarcito, entre otros. En un principio los relatos recogidos del folklore alemán no eran destinados al público infantil de aquí que la crudeza del texto y las alusiones sexuales fueran más explícitas. Posteriormente serían los propios Hermanos Grimm al descubrir al público infantil los que se dedicaran a suavizar y refinar los textos.


Si en un primer momento la obra de los hermanos Grimm carecía de ilustraciones, no es el caso de la edición que ahora está en nuestras manos. Las bellísimas ilustraciones de esta edición han corrido a cargo a cargo del pincel  de  Iban Barrenetxea   con la maestría a la que nos tiene acostumbrados. Iban Barrenetxea no es la primera vez que se adentran en los clásicos. La originalidad de sus ilustraciones, la belleza y elegancia en la composición de escenas y la utilización del color ensalzan sin duda cualquier obra, pero sobre todo da un aire lírico a la obra clásica. 




La perfección en las descripciones  arquitectónicas que pueblan muchas de sus obras, la exaltación de la naturaleza, aspecto clave en su obra, la estilización de sus personajes y la utilización de  colores suaves que nos alejan y hacen olvidar, por fortuna, a la edulcorada factoría Disney, encontrándonos ante una obra maravillosa que da gusto revisar. Sin duda Barrenetxea se ha convertido y es ya uno de los autores imprescindibles en el panorama del álbum ilustrado actual.



La Editorial Nórdica Libros y el autor, además, lanzan una Apps para iPad de este maravilloso libro para los amantes de las Tecnologías.
LUIS.