En la infancia hay momentos inolvidables que se guardan en
nuestra memoria y se mantienen imborrables. Momentos cargados de sensaciones
que vuelven a nosotros cuando ya adultos aparecen de nuevo y vuelve a surgir
esa ilusión infantil. Instantes cargados
de sensaciones y experiencias que
guardamos en un rincón de nosotros mismos y que afloran como el primer día.
Una mañana de invierno Peter despierta y observa a través de
la ventana un paisaje nevado. Es su primer día de nieve. Este sencillo suceso
nos va a permitir acompañarlo en sus juegos y paseos a través de la nieve que lo llevarán a descubrirse a si mismo y a explorar
el mundo que le rodea. Un día lleno de descubrimientos y aprendizajes, de alegrías
y también de tristezas. Pero quizá, y de eso no tenemos duda los que lo hemos
vivido, ese fortuito día de nieve sea sin duda imborrable en su memoria.
Un libro rico en matices, desde la alegría infantil pasando
por la sorpresa, la tristeza, las sensaciones que provocan esa primera vez. “Un
día de nieve” plasma a la perfección los sentimientos de un niño ante el
descubrimiento de sucesos novedosos.Es al mismo tiempo el primer contacto en libertad frente a un hecho novedoso, el aprendizaje autónomo que surge de las
experiencias y exploración de lo que hay a nuestro alrededor. Un día de nieve
convierte la curiosidad y la sorpresa infantil en una historia entrañable.
Aunque este libro pueda parecer una novedad tanto en sus
historias como en sus ilustraciones, un día de nieve fue escrito por el gran
escritor e ilustrador Ezra Jack Keats y publicado por primera vez en 1962 en
Estados Unidos. La editorial Lata de Sal ha rescatado en su Colección Vintage esta joya de la
literatura infantil ilustrada que fue merecedora de la Caldecott Medal en 1962.
Este es el primer libro en la literatura infantil ilustrada que es protagonizado por un afroamericano, de aquí su gran valor, en una época tan convulsa y reivindicativa para los derechos civiles de los ciudadanos de color de los Estados Unidos. Ezra Jack Keats introduce por primera vez en los libros infantiles el multiculturalismo y la cotidianidad urbana de modo muy natural, convirtiéndolo plenamente en parte de la historia.
Fue también uno de los primeros artistas en usar el collage como
técnica plástica en los libros ilustrados para niños y en este caso mezcla
dicha técnica con el uso de guache y la acuarela. La mezcla de dichas técnicas da
un valor añadido a una de las obras principales de Keats. También fue uno de
los primeros en ilustrar postales para la Organización Unicef
"Un día de nieve" puede ser considerado como uno de los libros
más importantes de la literatura ilustrada para niños del siglo XX y todo un
referente en obras posteriores y supondrá un antes y un después tanto en las
historias como en la plasmación artística de las obras literarias para niños.
La editorial Lata de Sal nos ofrece también la oportunidad
de descubrir nuestras dotes de artistas con el regalo que acompaña a este maravilloso
libro.